jueves, 10 de septiembre de 2009

Perú y la herida que aún no cierra

La selección peruana perdió una vez más, y esta vez de visita a manos de Venezuela. Este resultado (siendo realistas) era de esperarse, ya que Perú nunca pudo curar esta enorme y cada vez más grande herida que han sido las eliminatorias para el mundial.

Si bien el final del primer tiempo nos dejaba algo tranquilos (1-1) por no estar perdiendo goleados de visita otra vez, en la segundo mitad se abriría nuevamente esta tediosa herida. Alberto Rodríguez quien venia cumpliendo una regular actuación tuvo que salir atendido y regresó luego con parche en la frente, sí tenía una herida. Fue desde que pasó este incidente que Perú comenzó a flaquear, Venezuela comenzó a tomar el dominio total del balón e hizo que la defensa que parecía algo sólida se convirtiera en una sala de emergencias.

Y es que en general Perú no marcaba sino flotaba. Ramos no cumplió con sus coberturas y durmió muchas veces. El ‘Chorri’ demostró que en fútbol de hoy ya no se gana con el corazón. Arriba nos abandonó muy temprano nuestro más peligroso Guerrero y Fano no estuvo fino. Venezuela nos rascó la herida fuertemente demostrando que ellos si pelan por algo, que realmente si han evolucionado y no han involucionado como nosotros.

El golpe que sufrió Rodríguez, es el golpe que nos dio Venezuela y que no nos permite despegarnos del fondo. Necesitamos un doctor o entrenador que nos de un verdadero diagnostico para esta herida que ya mas parece una enfermedad sin cura.